CABEZA
- CUELLO: Largo y recubierto de un fino plumón, lo que permite introducir la
cabeza en los más hondo del cadáver. La ausencia de plumas grandes evita
que el cuello quede empapado de sangre, facilitando su limpieza.
- OJOS: No pueden
moverse mucho dentro de sus órbitas, lo que significa que el ave debe
ladear, bajar o subir la cabeza para dirigir su visión hacia el objetivo.
- PICO: Muy robusto y casi tan largo como la cabeza, permite desgarrar la
piel dura de los grandes cadáveres.
- LENGUA: Tapizada de púas, permite arrancar en pocos segundos la carne
blanda que recubre los huesos y, en algunos casos, extraer el tuétano de
los huesos.
ALAS
Largas, anchas y más o menos rectangulares, están adaptadas para sacar
el máximo provecho de las corrientes aéreas ascendentes o térmicas, permitiendo
que el ave se remonte sin esfuerzo.
GARRAS
Poco desarrolladas y con las uñas romas, prácticamente carecen de fuerza
y habilidad prensil, y permiten al ave recorrer cortos trechos por el suelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario